La palabra percusión proviene del latín percussio, una variación de la palabra percussus,
que hace referencia a la acción de golpear, sacudir o vibrar algo de forma repetida.
Esta percusión puede realizarse mediante baquetas, con barras metálicas, con las manos, con teclados o golpeando dos cuerpos entre ellos. Esta gran variedad de
posibilidades permite obtener un amplio rango de sonidos y tipos de instrumentos.